lunes, 25 de febrero de 2013

Odisea

Penélope Blue´s
desapareció con su madeja de treguas

Ardió en Troya 
un todo ha terminado.
Sentado en la tapa del water del baño
de un tocador en Ítaca

 Ulises lee en los labios
 del espejo
su epílogo a la Odisea.


domingo, 24 de febrero de 2013

febrero y domingo




Titulares de un domingo
ha pasado la marea de protesta por febrero
el numero 2 del gobierno la llama golpista
los duques de la fundación hacen una declaración de inocencia

las amiga princesa del rey hace caridad con los duques
el rey va de incógnito para cazar al cinismo
el papa canta su último ángelus
la nieve asomando
Egipto e Italia votan al caos
Sotheby's subasta truhanes
los amantes besándose en París
ha muerto un cualquiera
ha nacido otro
ha ganado el Barca
asesinan al ciudadano belga en México
los sobres los lleva el cartero Barcenas
ahora llueve
va subir el euribor, la luz y 
la crisis
y yo dibujando harakiris de mariposas.






jueves, 21 de febrero de 2013

Tag DovE62




De un lado al otro del clítoris en la avenida
soy una rata audaz encaramando aerosoles
en los callejones sin salida

donde prohiben aparcar

aunque llamen a la grúa

de quién es la pared

sino mía.


domingo, 17 de febrero de 2013

La mudanza de Raquel

.

He traído un montón de cajas de cartón para hacer la mudanza, otra más, ni recuerdo las que he hecho.

La primera fue con mi padre cuando tenía 9 años. 
Llevamos todos los muebles desmontados a pie porque nos trasladábamos a la calle de abajo. A ratos perdidos durante dos meses, camas, armarios y demás enseres fueron desfilando por la calle.
Nunca le pregunté a mi padre porqué carreteamos como mulas los muebles y es que me sentía tan bien por ayudarle. 

Solía acompañarle a todas partes donde él quisiera llevarme, que por lo general era a todas menos al trabajo.
Me cogía de su mano y yo le acosaba a preguntas tipo: papá porqué vota una pelota o papá porqué te sale barba.
Que mi padre se afeitará y verle hacerlo, me tenía fascinada.

Una mañana cogí su brocha, su maquinilla de afeitar y subida a una banqueta me embadurné la cara con la espuma. Al pasar la cuchilla me hice un tajo e hice lo mismo que él, cogí un trocito de papel y lo puse sobre el corte hasta que dejó de sangrar. 
Aún tengo la cicatriz.
Otra vez de nuevo comienzo con mi mudanza, armo las cajas de cartón y sacando los libros, al extraer un tomo grueso se desmorona la balda y unos cuantos caen sobre el suelo abriéndose.
El polvo en suspensión sobrevuela hasta la ventana atrapado por la pequeña luz temprana

que sale del velux.
Una araña oculta enfila ese caos de papel y teje su hilo resplandeciente por esa misma claridad que parece observarme mientras huye por el batiente dejando atrás su escalera sin peldaños de seda.
Una  metáfora me escala como si el tiempo fuera como una araña letal que nos envuelve en su capullo...
No nos movemos por el, es el que nos mueve hasta que deja de hacerlo e inermes nos secamos en su envoltura traslúcida. 


Al recoger los libros del suelo han parecido varias sorpresas.
Recuerdo que en otra época solía guarecer cosas diversas entre páginas determinadas, bien por señarlarlas o bien porque me resultaba el lugar idóneo para acogerlas.
Que otro lecho más adecuado para dormir que en la horizontal hacia el techo de onírica verticalidad.
Nunca he podido doblar las paginas de los libros así que he utilizado todo tipo de objetos para marcar suspáginas.
Aparecen unas entradas de la película Fargo y en otro una flor silvestre adolescente violeta que aquel chico me dio diciéndome: Para ti, por esos puñales  de tus ojos con los que hieres. 

Sonrío y siento un pellizco todavía al recordarle.
La flor disecada marcó su negativo sobre el párrafo de la novela y la escucho leerse en el silencio:
-Se la ha llevado...
Y se retorció la manos como si aquel ademán hubiera querido expresar esto: “ He hecho todo cuanto era posible; yo no tengo la culpa de nada”.
Levantó ahora sus manos y volvió a decir:
-¡Se la ha llevado!
János le miraba sin comprender. No entendía ni una sola palabra de lo que le decía el viejo, pero su corazón se encogió, como latiéndole en la garganta, al comprender instintivamente que ocurría algo extraordinario.
Permanecieron así durante unos cuantos instantes, chocando las miradas. 

En el rostro del viejo se reflejaba en descontento al ver que János no tenía aún bastante con esa breve frase para comprender lo sucedido:
-¿Qué es lo que se ha llevado? ¿Quién se lo llevó?
El viejo repuso susurrando:
-¡A esa mujer!... El agua
Las palabras parecían partirle en dos la garganta a János al proferir:
-¿A Anada?
-Sí.

De pronto el libro enmudece, lo meto dentro de la caja para continuar recogiendo el resto sobre el suelo.   

También veo una foto de mi padre cuando era niño de guerra que mordía  con pánico los pañuelos en el refugio antibombas y otra como niño de posguerra con su camisa de percal blanco arremangada sobre los codos, los pantalones cortos, descalzo sobre la hierva al lado del molino, en una de sus manos la cuerda de su caballo de cartón con ruedas  que solía llevar al río para que bebiera.
Mi padre octogenario, es el último superviviente en la mudanza de su vida, la memoria donde perviven sus padres, su abuela, sus tíos, sus vecinos, sus amigos incluso su mujer.
Una lágrima me abrasa la mejilla por él justo donde tengo la cicatriz y río al mismo tiempo por su humor entre lo absurdo y lo lúcido con el que suele decirme jocoso: 

Raro es el que va al cielo...
Mi padre presente en la mudanza de mi vida es un paladín intemporal que resiste el embate de la nostalgia, las ausencias, al miedo, al despertador sin manecillas del futuro con caja de mudanza que de tan repleta se ha tornado invisible a otros ojos que no sean los suyos.
Papá porqué estás tan callado, le pregunté hace unos días cuando me trajo un café.
No me respondió, sólo me miró como si al hacerlo volviera a ver a aquella niña a la que le compraba un helado de nata y un barquillo dorado.

domingo, 10 de febrero de 2013

Fundido en negro





Celia ladea la cabeza cuando está a punto de reír y entrecierra los ojos como su tía Caterina al sorprenderse.
Se ha dormido después de ver juntas El pequeño salvaje.
Caterina la consiente a conciencia,  pese a las regañinas de su hermana Rosalía que ha llegado ahora y al ver los desaguisado del piso ha vuelto a decirle.

Me la echarás a perder.

Sí... y…

Para ti es muy fácil no tienes que educarla.

Dirás adiestrarla...

Eres imposible Cati.

¿Qué es un imposible?

No me contestes con otra pregunta y no ladees la cabezota,`por cierto debes ocuparte de mi casa mientras estemos fuera.

Sí señorita Escarlata su mami se ocupara de Tara en su ausencia.

Sabes que detesto esa película.

Me gusta fastidiarte Mrs. Robinson titirititi.

Tú eres mayor que yo, así que eres la abuela del Graduado.

Je je je ya sabes que soy Rachel Rachel porque después de la peli me espera Paul Newman.

No te veo jugando a las cartas con nuestra madre y gritando amor amor en la capilla.

Por Paul Newman soy capaz de rezar y todo, creo en Dios por su culpa.

Jo jo pero si ha muerto.

Los dioses nunca mueren darling tiene sus eclipses pero renacen de las cenizas de sus ocasos.

Qué me dices del tiro en la piscina, Norma Desmond.

Exigencias del guión pequeña Miss Sunshine.

Y quién escribe el guión ¿William Holden?

Depende, ¿quién ha escrito el tuyo, Berlanga?

No el mío lo escribió Truman Capote.

Ah sí ya te recuerdo eres el chino Mickey Rouke.              

Jajaja nueve semanas y media estaremos fuera.

Vale, te regaré las plantas del apartamento Irma la dulce.

¿Qué vas a hacer este Largo y Cálido Verano?

Pues no sé llevar a mi amante El paciente inglés a tu casa Baby Jane.

Y para qué quieres la tuya Eva al desnudo.

No es lo mismo en casa Norman Bates pierde glamour, además me pondré todo tu atrezzo de Belle de Jour al Este del edén.

Ni se te ocurra tocar mis galas de las Amistades peligrosas.

Me quedarían grandes y se me caerían en el set Lolita.

Bueno sí estoy un poco rellena después de dar a luz a las criaturas de Tim Burton.

Pero... ¿Mi cuñado no es Míster Chips? Querida Petula.

Sí es Lawrence de Arabia sin moto. Por cierto Thelma te dejo las llaves de mi coche, las de casa y las de los vecinos de arriba.

¿Quién los de la semilla del diablo, qué tengo que hacer, regarles las flores del mal? 

Louise le habrás puesto gasolina al coche, me lo dejas siempre seco.
Son unos tiernos viejecitos sólo échale una miradita al gato se llama Oscar por Wilde. 
El depósito lo dejaré lleno no te preocupes, he cobrado mis atrasos, el León de la Metro ha soltado la pasta por fin, Thelma.

Oscar... le va más Dorian, desde luego tienen un encanto tétrico.
Cada vez que les encuentro, me chismorrean todos los cotilleos del edificio Dakota, que siniestramente babean con gozo Arsénico, sin compasión .
Le dejaré la ventana abierta a Dorian, para que disfrute con la ágata sobre el tejado de cinc caliente, seguro que lo tienen a palo seco.

Jejeje pobrecitos se aburren, pero hacen unas tartas deliciosas.

No me digas qué también te hacen batidos.... te van a coleccionar como Terence Stamp en el cuarto de Dorian.

Pues si me hacen batidos y es cierto, Oscar tiene un cuarto sólo para él, aunque conozco su piso nunca he visto esa habitación.

¡Mi intuición nunca deja de sorprenderme! lo sabía, te están haciendo luz de Gas, Ingrid, cuando de nuevo te embaraces, te captarán para sus ¡misas nigromantes!
Dónde se habrán ido de garbeo, al Narayama fijo…
Eres una pésima vecina, no les advertiste que se dejaran los dientes postizos.

Por cierto no te he contado que Mónica a dejado a Ramón.

No me sorprende el Divorcio a la italiana de Sofía y Marcello, todo el día estaban poniéndose los cuernos en Amarcord.

Sí, la Dolce vita, les ha agotado.
Voy a despertar a la niña del Exorcista, nos vamos ya. 
¿Quieres algún recado para Miss Daisy?.

Dile a la Bardot que la aborrezco, amistosamente eso sí.

Se quejará de que nunca la llamas.

Insinúale que me he fugado con Sean Penn a la selva, para hacer una ópera bufa en el Nilo con Werner Herzog.

No te tomas nada en serio Cati, no vas a perdonarla...
Es ella la que no perdona a mí Rosi, nada es serio y todo lo es, la vida es cine, un drama cómico, una tragedia burlesca entre Candilejas, hermana Marilyn.
Unas veces de estreno otras de reposición, otras refrito, otras de serie B, otras bizarro y otras una obra maestra.
Intento no repetir flash backs, ni hundir las rodillas en plano americano.
Prefiero los finales abiertos y que el mundo marche como diría King Vidor,
hasta que salen los títulos de crédito con epitafio, el mío será: No estoy aquí.




miércoles, 6 de febrero de 2013

1 H dos O


Ha tenido un mal día 
una mala semana
un mal mes 
un mal año
en un rincón
hay una burbuja
humedeciéndome la cara
con dos átomos de oxígeno.






domingo, 3 de febrero de 2013

La huella




 Una huella de astronauta.
¿Seguirá allí todavía como el fósil de una estirpe extinguida?

o será cierta esa teoría de que nunca alunizaron.
¿Dónde estabas en los sesenta?
¿Habías nacido, que hacías el día de aquella noche?
¿La luna llena perdió su encanto por la pisada
no es ya un refugio y la excusa de los locos,
el imposible amor de los poetas,
el travestismo de los licántropos?

Tengo la cama en un cráter

en el mar de la tranquilidad
en su cara oculta
protejo a mi cisne
de un cántico moribundo
le cubro con todo el caos
de los millones de años luz
si me has visto allá arriba

también estabas tú.

viernes, 1 de febrero de 2013

La cartela



En un cartón 
doy el primer trazo 
no soy ella y soy ella
y sus ojeras y párpados 
y el ascenso de los pómulos
y sus deltas
y su silencio plegado en la boca
sucios mis dedos  ya son tuyos
mías sus arrugas sus secretos y sus albas agotadas.

Tengo que poner un título en la cartela
que diga quién qué eres,
escribo
Tierra.