lunes, 13 de septiembre de 2021

A Manu en su Parra


Querido amigo 

parece que fuera el viento

quien trae flamante la carta donde tu mayo aparece

desde aquellas primeras letras detenemos imposiblemente

ese tiempo que a veces se pierde o se esconde de nosotros

impidiéndonos ser dueños de nuestra vida.


Vidas nuestras que se llenan o vacían con hilo de reloj de arena

compartidas en los blancos desiertos de estas invisible hojas

desalojamos del corazón dolor o alegría 

pesándonos arte poesía y belleza

como son 

extraños males que nos dejan solos

transparentes desguarnecidos.


Inventamos un limbo 

cercano por relativo lejano por absoluto

donde una amarra lleve lo efímero a lo eterno.


Sabiendo que tienes tú como emblemas paz y pasión

te respondo desde un mayo sin memoria 

tantas veces compartida a fuerza de esa luz 

tan antigua tan nueva

que ilumina la cara de dos mundos suspendidos en lo oscuro.