Martes imponiendo caldo caliente de febrero
y coplillas desfilando al tropel de una charanga por las calles.
Los disfraces han salido de la tienda,
el frío ahuyenta al trópico tendrán las diosas con túnica de lino
que ponerse los leotardos.
Las Drag desfilan con botas de peluche clavando en el suelo
el ancho perfil de sus tacones
a Casanova le han forrado la capa de borreguito.
Ha venido del destierro en Elba,
el emperador del abrigo cruzado y la escarapela en el bicornio
para arengar a la altura
de la estatua del rey Pelayo disfrazado de folklórica
que el tiempo
nos contempla.
Miro todos los disfraces
los modernos, los antiguos
detrás de la bufanda
mi careta es sólo mi cara.
Mañana las campanas de San Lorenzo
con un vuelco darán las doce
para enterrar la plata a la sardina
miércoles
y en la frente de su luz
habrá una huella
de ceniza.